El robo de información se produce cuando un ciberdelincuente accede a la base de datos de un servicio o empresa que contiene información personal de sus usuarios. Esta información puede ser nombres de usuario y contraseñas, números de identificación, direcciones e incluso datos bancarios. Esta información se vende luego en línea como listas a grupos criminales que, a su vez, intentan sacar provecho de esta información.
Laura Klusaite
Jan 31, 2022 · 5 minuto de lectura
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La expresión robo de datos puede tener diferentes significados según el contexto en el que se utilice. Sin embargo, básicamente se refiere al robo de información, ya se trate del robo de datos personales o del robo de datos de empresas o instituciones. El robo de datos puede producirse por diversos motivos, y puede adoptar diversas formas.
En internet, el robo de datos puede realizarse de muy diferentes maneras. Algunas de las más frecuentes son los ataques de phishing, que tratan de obtener credenciales de acceso o datos bancarios de sus víctimas mediante la ingeniería social, pero también pueden realizarse mediante una infección por malware o un ataque de fuerza bruta, entre otros métodos.
Muchos de los ciberataques y robos de datos tienen como propósito el robo de información personal en la red. Mientras que los ciberataques llevados a cabo contra empresas o instituciones suelen tener como propósito el robo de datos institucionales, documentos y otros archivos críticos para su funcionamiento, los ataques llevados a cabo contra individuos suelen tener como propósito el robo de su identidad.
Para entender en qué consiste el robo de identidad, basta con pensar en todas las formas en que te identificas día a día para realizar cualquier tipo de gestión telemática. Tus claves de acceso a tu correo electrónico o a las redes sociales, el PIN de tu tarjeta, los datos de tu cuenta bancaria… Un hacker puede hacerse pasar por ti en estas plataformas y utilizar tu identidad en su beneficio si no las proteges adecuadamente.
Hoy en día, el robo de datos con éxito puede adoptar diversas formas, ya que la información vital para nuestras vidas se ha multiplicado mucho. Algunos de los diferentes tipos de robo de identidad son:
En España, algunos de los robos de datos más peligrosos llevados a cabo en los últimos años han tenido lugar mediante ataques de ransomware similares al ataque de ransomware WannaCry que tuvieron lugar en el año 2017. Los ataques de ransomware acceden a los datos de los usuarios y los encriptan, de forma que los hackers exigen luego un rescate para liberarlos.
En 2021, España fue golpeada duramente por un gran ciberataque que secuestró mediante ransomware el funcionamiento de las 762 oficinas del SEPE, paralizando el pago de prestaciones de desempleo en un momento crítico de la crisis del coronavirus, aunque también han sufrido robos de datos similares otras instituciones como universidades, laboratorios e incluso el Ministerio de Trabajo.
Existen diferentes plataformas online que te permiten contrastar tus correos electrónicos con una base de datos de filtraciones pasadas. Si tu correo se encuentra dentro de esa base de datos, entonces recibirás una alerta comunicándote que tu cuenta ha sido vulnerada. Además, otras herramientas anti malware y diferentes antivirus también pueden avisarte cuando alguna de tus credenciales se vea expuesta debido a una filtración en cualquier plataforma online que utilices regularmente.
La prevención es una de las herramientas más importantes para impedir el robo de datos online. Algunas de las medidas que puedes adoptar para proteger tu identidad y evitar el robo de información personal en la red son:
Utilizar un gestor de contraseñas es una de las medidas esenciales para proteger tus claves de acceso y minimizar la posibilidad de sufrir un hackeo en tus cuentas. Los gestores de contraseñas generan claves complejas, únicas y muy difíciles de hackear para tus diferentes plataformas online, y las almacenan en una bóveda segura en tu dispositivo.
Una VPN puede mantener tus datos de acceso a salvo cuando te conectas a internet desde redes Wi-Fi públicas, ya que encripta de forma robusta los datos que envías y recibes online para impedir que sean espiados por terceros conectados a esa misma red Wi-Fi, o mediante un ataque de intermediario.
Revisa con frecuencia las plataformas a las que sueles acceder a internet, asegúrate de que no hay ningún tipo de actividad sospechosa en ellas, y, en el caso de que encuentres algo extraño, cambia inmediatamente tu contraseña y comunícate con las autoridades para denunciar el hackeo.
Si la plataforma vulnerada ha logrado enviar mensajes a tus contactos en ella, trata de ponerte en contacto con ellos también para advertirles del hackeo y evitar que caigan también ellos víctimas de un ciberataque.
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